Ironías del destino, los canarios de hoy en día
siguen adorando (los creyentes) a su milenaria Diosa Madre, aunque sin saberlo.
Todo ello por la labor (siempre interesada) de los primeros religiosos
cristianos que llegaron a nuestro Archipiélago, como Avanzadilla del cruel y
sanguinario ejército invasor castellano. Prueba de ello son los cultos
mantenidos en la actualidad en las islas de Tenerife (Candelaria) y Gran
Canaria (El Pino).
- Tenerife: algunas fuentes anteriores a la Conquista , afirman que
los guanches creían y adoraban a una deidad femenina, a la cual el dominico
Padre Espinosa identificó como CHAXIRAXI. Es decir, la "madre del
sustentador del cielo y la tierra". Coincidiendo con ese culto a la Diosa , Francisco Osorio
asegura que "se vendría con ello a fundamentar la existencia de alguna
suerte de matriarcado en Tenerife, por el gran respeto que la figura femenina
movía y promovía en todos los estamentos sociales guanches". Por todo ello,
es muy probable que los misioneros cristianos que "visitaban" la
isla, aprovechasen sus creencias en la Diosa Madre , para inspirar a sus catecúmenos el
culto y la devoción a la imagen de la "Virgen María". De mujer a
mujer...
Tal y como probara el Presidente de la Real Academia de
Historia de España, Antonio Rumeu de Armas, las costas de Güimar y de la actual
villa de Candelaria, ya habían sido objeto de una prolongada acción
evangelizadora desde mucho antes de la Conquista de Tenerife. Y en el transcurso de esa
acción misionera, "se introdujo en el lugar una imagen de la Santísima Virgen ,
bajo la advocación de la
Candelaria ". Hoy está probado que la imagen fue dejada a
propósito por los frailes misioneros de las Islas Señoriales de Lanzarote y
Fuerteventura. Y para que la misma surtiera efecto, se valieron de un guanche
que tiempo atrás había sido capturado, luego "cristianizado", y
finalmente devuelto a su tierra: el conocido como Monje Antón.
Este isleño convertido sería el encargado
de convencer al Mencey de Güimar, "de las ventajas de la nueva
religión", y de que la imagen de la "Señora de Candelaria con el
Niño", era la representación de la "Diosa Madre Chaxiraxi"; y el
niño era el símbolo de la fecundidad. Es decir, que la devoción a María (la
"diosa" cristiana) fue el camino más sencillo que encontraron los
frailes del eremitorio de Güimar para convertir a los naturales, porque
armonizaba con dos ideas muy arraigadas en las creencias de los guanches:
a) la de una deidad femenina, traduciendo el pensamiento
de los guanches, y los vestigios del culto a la maternidad y fecundidad (la Virgen con el niño)
b) la del respeto, o mejor, temor supersticioso a
la mujer en solitario, por su relación con "las fuentes de vida".
Por eso, según fray Alonso de Espinosa, "los
guanches adoraban por cosa celestial y DEIDAD SUPREMA a la Virgen de Candelaria y el
Niño".
Es decir: los isleños de Tenerife (los creyentes)
siguen adorando hoy en día a la Diosa Chaxiraxi , "camuflada" como
Virgen de Candelaria. Y para más Inri, una de las fechas de celebración anual,
es el 15 de agosto... El mismo día del BEÑESMED, la Fiesta de la Cosecha.
- Gran Canaria: como escribió Celso Martín de
Guzmán, "en Gran Canaria convergen las dos grandes ideas religiosas
originadas en el Neolítico... una, la de la GRAN DIOSA MADRE,
ligada a los núcleos agrícolas...". Al margen de dicha creencia, los
canarios adoraban el mito de ANDAMANA, una heroína que según la tradición había
logrado la unificación de la isla, y a la que el propio Guzmán denominaba
"la señora de la tierra". Para Francisco Pérez Saavedra, "el
papel femenino en todos los ritos de fecundidad es conocido desde muy antiguo y
la participación femenina resulta obligada: lo mismo en la siembra, que en la
recolección, almacenamiento de frutos o demanda de lluvias fecundantes".
Tras la Conquista , en 1483, el Obispo Juan Frías se
trasladó el término de Terori (hoy Teror), "a venerar la imagen de la Señora que los naturales
guardaban con piadosa devoción". Al respecto, el Obispo Cristóbal de la Cámara y Murga reseñó en
sus Constituciones Sinodales que "apareció en un pino alto que está junto
a la iglesia en el que están DOS ÁRBOLES DE DRAGO PAREJOS, cosa maravillosa,
plantados en el mismo pino, cerca de los cuales ESTÁN SEÑALADOS LOS PIES DE LA VIRGEN.. .". Otra
Crónica añade que "al pie de este pino, en un güeco que hace el propio en
sí, había una fuente de agua de la qual lavándose los enfermos de cualquier
lepra o enfermedad que tubiesen, heran libres Della".
El Profesor Antonio Tejera Gaspar desveló la
superstición, afirmando que "los grabados con siluetas de pies humanos SON
PODOMORFOS, que pueden relacionarse con algún significado religioso de los
canarios", añadiendo que "la existencia de dragos en el mismo entorno
de este pino, pudo en efecto haber tenido una simbología religiosa para los
nativos". Para Felipe Bermúdez Suárez, "no resulta aventurado
considerar la hipótesis de la existencia de algún santuario aborigen en el
bosque de Teror. Sería la base de la posterior devoción cristiana en torno al
pino. En apoyo a tal hipótesis estaría la profunda coincidencia entre la
presencia de lo femenino en la religiosidad aborigen, por un lado, y la
utilización de imágenes marianas por parte de los misioneros, por otro.
Estaríamos aquí ante un curioso elemento de continuidad entre lo aborigen
canario y lo cristiano".
Un santuario aborigen en el bosque de Terori; una
fuente de aguas benignas, teniendo en cuenta que los canarios creían que sus
espíritus, "los invisibles" habitaban en el agua; un podomorfo que
representaba a las entidades sobrenaturales de naturaleza benéfica (espíritus
de los antepasados); un pino con dos dragos que confirma el carácter
mágico-religioso del lugar; y finalmente la imagen de la Virgen ,que podría
representar la "presencia" de la Diosa Madre.
En definitiva, que igual que en Tenerife, los
grancanarios (insisto, los creyentes) adoran a su Diosa Madre
"camuflada" de Virgen del Pino...
AURELIANO MONTERO GONZÁLEZ, DE SU
LIBRO "¿TIENE CANARIAS DERECHO A SU INDEPENDENCIA?"
Fuente: La Verdad de Lanzarote 31 de Diciembre de 2012.
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